domingo, 4 de febrero de 2007

The making of blogolate

De un tiempo a esta parte se ha puesto de moda que para cada película confeccionen unos anuncios vestidos de documental que se llaman "The making of", o "Como se hizo". En esos docu-anuncios aparecen los actores hablando de lo bien que se lo han pasado trabajando con los demás, como si fuera el úncio trabajo en el que no existien compañeros cabrones, y luego añaden algo sobre lo bueno que es el director y lo original que es su nueva película, aunque luego no sea otra cosa que noventa minutos de correr y disparar.

El caso es que quería explicar el proceso de creación de mi blog y he decidido usar la coletilla del "Making of". Omitiré la parte de explicar lo bien que he trabajado conmigo mismo y lo bueno que soy dirigiendo el blog. Quedaría narcisita.

Todo empezó ayer por la tarde. Era un día frío, pero a mi plim, pues tenía la calefacción de gas funcionando a toda pastilla. Me hallaba sentado frente al PC y curioseaba por internet en lugar de estar limpiando el piso, que es lo que debería haber estado haciendo, pues la estantería del comedor tiene ya un dedo de polvo, pero bueno, como iba diciendo, curioseaba por internet y me puse a leer un blog. No un blog como el mío, si no un blog de alguien que tiene cosas interesantes que decir y que sabe cómo hacerlo (miseriasliterarias.blogspot.com). En un momento dado, me apeteció enviar un comentario al autor y para ello debía registrarme primero en la página de blospot o bien firmar con el infamante calificativo de “anonymous”. Como se puede deducir del extenso preámbulo anterior, opté por registrarme.

Una vez dentro, la página me preguntó el nombre del blog que quería crear. “¿Mi blog?”… Lo medité unos segundos y es posible que me rascara la cabeza mientras lo hacía. De hecho, como estaba sólo,  es posible que también me rascara alguna parte del cuerpo que no queda fino mencionar. Una vez hube terminado de rascar y meditaR, me decidí dar de alta un blog. Y continuar sin limpiar el piso.

Ahora tenía que escoger un nombre para él. Probé con “blogoman” y “blogocop”, pero ya estaban cogidos. A veces, lo que a uno le parece original, en realidad no lo es tanto. También sopesé los nombres de blogopedia o blogólogo, pero eran demasiado largos y difíciles de recordar. Finalmente, tras mucho más pensar y rascar, encontré el nombre de blogolate: un burdo juego de palabras que fusiona  "blog" y "chocolate", pero que me gustaba como sonaba. Además, puesto que no significaba nada, me podría hacer servir para lo que yo quisiera.

Finalmente copié un formato confeccionado por un fulanito de tal americano y el blog ya estuvo creado. Apareció frente a mi una página en blanco, bueno, mas bien en amarillo, y decidí que daría de alta mi primera entrada y seguiría sin limpiar el piso.

La entrada necesitaba un título. ¿Cuál? Tras un nuevo auto-brainstorming decidí poner “Todo principio tiene un inicio”. ¿Qué mejor manera de empezar un blog de nombre absurdo que el de colgar un título igual de absurdo? Me gustó: se parecía a una de esas frases pseudo-filosóficas de las películas de artes marciales, una de esas frases que un maestro suelta al protagonista y que, a partir de entonces, le lleva golpear a los malos con leches más potentes.

Ya tenía blog y un título para su primera entrada, sólo me faltaba escribirla. Lo que pasó después por mi mente lo podéis leer en la propia entrada. No todo, pues no escribí los pensamientos de contenido sexual que me vienen a razón de uno cada tres segundos.

Terminado el texto, lo publiqué y envié un correo a mis amigos para ver si alguien lo leía. Después apagué el ordenador y me metí en la ducha, que había quedado esa tarde y pensé "Otro día en que no he podido limpiar el piso: si es que nunca tengo tiempo."

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me he reído mucho(quien diga que siempre saca tiempo para limpiar el piso...en fin, que levante la mano, como en ese anuncio; ay, la tele, ya se sabe, nos coloniza poco a poco!), muy sencillo, directo y divertido. Hala, keep on writing!
Read u.

ADPA dijo...

Que guay, un comentario ! Alguien ha leido mi blog, que emoción, buahhh :'O